El cloro rápido o dicloro se utiliza para el tratamiento de arranque de la piscina y para casos rebeldes como aguas verdes o falta de cloración; es decir, lo que se busca es conseguir el nivel de cloro óptimo en poco tiempo. Esto se consigue al ser de disolución rápida, de esta forma el principio activo pasa inmediatamente al agua consiguiendo un efecto más efectivo.